Aunque desde luego me apasiona montar en bicicleta y todo lo relacionado con ellas, hay un aspecto que me atrae mucho y es el de idear "nuevas" bicicletas. Nuevas hasta cierto punto, pues no tengo los conocimientos como para construir un cuadro a partir de los tubos, que sería lo ideal, pero al menos partiendo de un cuadro existente crear una bicicleta nueva. Las posibilidades aunque menores son suficientes.
El primer proyecto en el que me embarqué fue a partir de un viejo cuadro de acero de dudosa calidad. La bicicleta original la compraron mis padres hacia el año 1990 como regalo de primera comunión para mi hermano. El presupuesto debía ser bastante ajustado según recuerdo y acabaron comprando la entonces novedosa "mountain bike". Se fueron al Pryca, hoy Carrefour y se trajeron una bicicleta que no funcionó bien ni aquel primer día.
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No conservo la foto de la bici original, pero era como esta |
Las manetas de freno eran de plástico no muy duro, con lo cual doblaban al frenar y era imposible ajustarlas, el sillín era penoso y se movía constantemente, los pedales se salían de la rosca y el manillar también y esto último era bastante inquietante....Mis padres no tardaron demasiado en darse cuenta de que aquello no tenía mucho futuro y a los pocos años acabaron comprando una de BH aluminio con grupo Altus de Shimano. Como el día y la noche. El tema es que yo vi potencial en la bici del Pryca y me la quedé. Con el poco dinero que tenía hacia 1995 me compré un sillín, un manillar y unas manetas nuevas y el cambio fue mas que considerable. Durante algunos años la utilicé a modo de bici de carretera para hacer pequeñas salidas hasta que mi novia me compró una nueva en 2004 y entonces cayó en el olvido. Cuando me asenté en una casa me la llevé para bici de diario pero en la primera salida perdí una biela. Me di cuenta en seguida claro!! pero lo que no encontré fue el tornillo que va en el eje y la bici quedó semi abandonada en un rincón del jardín oxidándose. Cuando mi mujer se aburrió de ver el hierro me dio un ultimátum. El destino era la chatarra pero no me resulta tan fácil tirar las cosas y empecé a manejar al idea de reaprovechar algo de aquello. La desmonté por completo y empecé el proceso de creación de una nueva bicicleta a partir de aquel cuadro y horquilla pero con componentes nuevos o reaprovechados de otras bicicletas. Un proyecto de presupuesto bajo pero con una idea clara de lo que quería conseguir.
El primer paso fue decapar la pintura. Aunque prefiero dejar la pintura siempre en su estado original, el hecho de que no fuese una bicicleta particularmente valiosa y el mal estado general de la pintura, tenía muy claro que había que eliminarla. Con el decapante y las lanas de acero quité toda la pintura y dejé el cuadro y la horquilla desnudos. Este era el aspecto que tenía en el verano de 2011.
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El cuadro casi decapado al completo. Aún se aprecia el color original |
Esto me permitió ver por primera vez algunos números de serie que nunca había visto, tapados por la pintura original, números que supongo que informen sobre su origen, aunque nunca conseguí ningún tipo de información al respecto. En marcas grandes es posible obtener el año y lugar de fabricación, pero en bicis de dudoso origen es mucho mas complicado.
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El número en cuestión es el BI 0093 CL |
Cuando tuve el cuadro bien pelado, lo lijé y le apliqué la imprimación con un bote de spray y después de volver a lijar un par de manos de pintura negra mate también en spray. Algo muy básico, ni siquiera me molesté en aplicar un barniz que seguro que hubiera protegido mucho mejor la pintura, aunque para haber pasado ya casi diez años, no ha resistido mal el paso del tiempo.
Sin embargo no todo fue coser y cantar. A la hora de empezar a montar los componentes, que es mi parte favorita (no soporto decapar y pintar), comenzaron también los quebraderos de cabeza. Compré un eje de pedalier después de medir el tamaño del original, pero cuando fui a instalarlo no enroscaba. No recuerdo ya cual fue el proceso de investigación, de pedir ayuda y demás, supongo que en los foros de foromtb.com y algún otro aun queden mis preguntas, lo cierto es que al final descubrí (o me descubrieron) que la rosca del eje de mi bicicleta no era la mas habitual rosca inglesa, si no italiana. Descubrirlo fue un gran paso adelante, pues ya estaba casi decidido a reaprovechar el viejo eje, aunque no me hacía demasiada gracia, pues era de mala calidad. La oferta de ejes de rosca italiana nuevos tampoco es que fuera espectacular, al menos no en aquellos años y acabé comprando un eje Shimano de gama baja.
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Con el eje del pedalier por fin instalado y la dirección. Las ruedas no eran las definitivas |
Instalar la dirección fue el siguiente paso, aunque esta vez no recuerdo haber tenido mayores problemas al respecto. Me fabriqué una herramienta casera que vi en alguna parte. Básicamente una varilla roscada con tuercas y arandelas que al ir cerrándose sobre las cazoletas de la dirección, entraban a base de presión.
A estas alturas ya tenía bastante claro lo que quería conseguir, una bicicleta de paseo, cómoda para pedalear en posición erguida, muy sencilla mecánicamente (single speed) y por supuesto de presupuesto bajo. El resto del montaje no supuso mayor problema excepto por la potencia que fue el segundo gran quebradero de cabeza. Mi idea era comprar una potencia de estilo bicicleta holandesa, que me permitiera subir la altura del manillar para tener la posición erguida que quería. La dirección era de una pulgada así que a priori tampoco tenía mayor problema para encontrarla, pero cuando la compré descubrí con horror que no encajaba. De nuevo un periodo de investigación y preguntas por todas partes para finalmente descubrir que entre las potencias de una pulgada no todas tienen los 22.2 milímetros standard. Finalmente encontré la adecuada, la única que encontré en realidad, en una tienda online (Dutch Bike Bits) que tenía la potencia de una pulgada pero con 21 mm de diámetro, aparentemente típica de algunas viejas bicicletas Schwinn.
El resto de componentes no tienen mayor misterio, las manetas son sencillas, así como el piñón y el plato y cadena. Los frenos son cantiléver, que me gustan mucho, sobretodo en el aspecto estético. Los reaproveché de una bicicleta abandonada en la intemperie desde hacía años y que estaba completamente oxidada. Por último las ruedas son de mi mountain bike de 2004 y las cubiertas unas Fat Frank de Schwalwe.
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Aquí está la donante con los frenos cantiléver, una vieja Orbea Sherpa |
Los retoques finales fueron lo que mas me costó, pues tenía ya ganas de probar la bicicleta y básicamente la puse lo que tenía por casa, un sillín horrible, manetas plasticosas del Decathlon...con la idea de cambiarlo a corto plazo. Pero todos sabemos que esto no funciona así y las cosas provisionales a veces se quedan mas tiempo del previsto. A día de hoy sigo sin las manetas y sin la tija del sillín definitivos....
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La bicicleta acabada a falta únicamente de unos puños decentes y una tija mas adecuada. |
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